EL POST DE LAS PREGUNTAS
No tuve tiempo para escribir un post que valga la pena ser leído. En momentos como estos suelo recurrir a mis colecciones, para ver si acicalando alguna puedo salir del trance. La más atractiva que tengo a mano podría ser la de las preguntas. Esta manía de pasarme la vida formulándome preguntas me ha causado muchos problemas y, ahora, al revés, para resolver uno me estoy preguntando que puedo hacer con esta colección. Ya he desechado todas las ideas que se me vinieron a a la mente. Si mis lectores no fueran tan fomes como son, les podría proponer que, juntos, eligiéramos “las diez pregunta más importante de todos los tiempos”. Las que propondría, para comenzar, provienen de mundos tan disímiles como la historia, la política, la música, la radio, el teatro, el cine, la televisión y nos permitiría sentar, en una misma mesa, personajes tan diferentes como Arturo Prat, Augusto Pinochet, Carol King, don Francisco, Eduardo de Calixto, Edward Albee, Enrique Bravo Menadier, Henryk Sienkiewicz, Jim Abrahams, Jose Luis Perales, Mauricio Redolés, Pachuco, René Clement, Roger Garaudy y Sydney Pollack, sin perjuicios de los que ustedes pudieran invitar, con su pregunta bajo el brazo.
Pero no, ya se que no resultaría. Lo mejor será publicarlas, tal como están y ¡hasta pronto!
¿Ha almorzado la gente?
Paris brûle-t-il?
¿Qué será lo que quiere el negro?
¿Quien mató a Gaete?
¿Quién quiere ser millonario?
¿Quién soy yo?
¿Quién tiene la razón?
¿Quo vadis?
They shoot horses, don't they?
¿Se puede ser comunista hoy?
Who's afraid of Virginia Woolf?
Will you love me tomorrow?
¿Y dónde está el piloto?
¿Y en Iquique también perdimos?
¿Y quién es él?
PS: Sólo para provocar, les cuento, en relación al frustrado concurso, que habría votado por la de Iquique.
Pero no, ya se que no resultaría. Lo mejor será publicarlas, tal como están y ¡hasta pronto!
¿Ha almorzado la gente?
Paris brûle-t-il?
¿Qué será lo que quiere el negro?
¿Quien mató a Gaete?
¿Quién quiere ser millonario?
¿Quién soy yo?
¿Quién tiene la razón?
¿Quo vadis?
They shoot horses, don't they?
¿Se puede ser comunista hoy?
Who's afraid of Virginia Woolf?
Will you love me tomorrow?
¿Y dónde está el piloto?
¿Y en Iquique también perdimos?
¿Y quién es él?
PS: Sólo para provocar, les cuento, en relación al frustrado concurso, que habría votado por la de Iquique.
10 Comments:
Lo de las preguntas está muy bien, pero algunas de las preguntas deberían llevar sus respuestas. Envío aquí una que encuentro muy graciosa, tomada del "Hamlet" de Luis Buñuel:
Hamlet: Margarita, has conocido el mar?
Margarita: En eso estaba, señor, cuando llegasteís.
Saludos, Oscar
Buen punto. Algunas preguntas ameritaban respuesras. En una entrevista que está en internet, Alberto Cardemil, actual diputado, a la sazón subsecretario de Interior, respondió una de las preguntas. Lo narra así:"A las 22:45 horas tuve información fidedigna del triunfo del No y le pedí una audiencia al Presidente de la República. El general Pinochet bajó a mi despacho y yo le informé que el plebiscito se había perdido, le di cuenta pormenorizada de toda la información consolidada regional. Él me preguntó específicamente: “¿Y en Iquique también perdimos?”. Yo le contesté: “Sí, Presidente, ..."
No entiendo como ocurrió, pero solo ahora me percato que en la lista no está una pregunta que tengo dando vuelta por años. Esto me permite consignarla, con sus circunstancias:
“Desde la puerta de “La Crónica” Santiago mira la avenida Tacna, sin amor: automóviles, edificios desiguales y descoloridos esqueletos de avisos luminosos flotando en la neblina, el mediodía gris. ¿En que momento se había jodido el Perú?
Es el primer párrafo de “Conversaciones en la Catedral”, novela de Mario Vargas Llosa.
Papá .. se te olvidó agregar a la lista la pregunta ¿Y ahora quien podrá defendernos?
Carmen Loreto.
Yo tenía anotada en un cuadernillo por ahí otra pregunta y su respuesta (con el autor, un francés del siglo XVIII) cuyo nombre no logro encontrar.
El principe (propone un suicidio conjunto, a la princesa, después de la noche de bodas): Vivir aún, amada mía? No os preocupeís, de éso se encargará ya la servidumbre!
Saludos número 2, Oscar
Hola Jorge:
Primero, una rectificación: La canción de Carol Komg se llama "Will you still love me tomarrow".
Luego, un aporte:
De Caperucita Roja:
"¿Abuela, porqué tienes esos dientes tan grandes?". y de "Lejos del amor", de Illapu:
¿Qué hacen aquí estas palomas/ tan ñejos del mar, qué hacen aquí.
Y, felicitaciones .
Agradezco los aportes. Anónimo me hizo una rectificación valiosa,pero confundió a las palomas con las gaviotas.
Así es la vida...
Celebro que entre los personajes, Jorge, coloques a un chileno que marcó mi infancia como auditor radial, mi juventud como compañero de trabajo y muchos años como tele espectador de sus concursos. Hace ya tiempo que murió y millones de hoy no lo conocieron. Pero tuvo grandes virtudes, estilo propio e inventiva.
Desde cuando animaba por Radio La Americana los concursos desde el Negro Bueno de la Alameda, hasta sus años postreros en la TV.
Rindo mi particular y sentido homenaje a uno que en los recuentos es muy poco mencionado, siendo parte de la historia de la radiodifusión y la llamada pantalla chica en Chile. Lo pongo como se merece:
ENRIQUE ARMANDO BRAVO, en sus tiempos de radio, convertido en la TV en Enrique Bravo Menadier.
Esteban:
Mientras leía tu comentario estaba pensando en Eduardo de Calixto. Me sorprendió saber que hablabas de Enrique Bravo Menadier, aunque me imnagino que estarás de acuerdo, que tratándose de hombre de radio, habría que extender el homenaje al creador de "Hpgar, dulce hogar".
Uno de sus concursos radiales más recordados fue "¿Quién tiene la razón?!.El animador planteaba un tema y ponía a dos concursantes a debatir. La idea era que los contrincantes fueran todo lo apasionados que pudieran. Al final, había un ganador, el auspiciador del programa, que era una tienda llanada "Fermín" de modo que siempre Fermín tenía la razón.
Un día cambió el auspiciador y el público asistente se encontró con la mala noticia que la razón ya no la tenía "Fermín", sino otra empresa. El público reaccionó oponiendose al cambio y por la radio se escuchó un coro gritando !Fermón! !Fermín!.
El epidodio fué digno de un episodiode alguna novela de Mario Vargas Llosa.
De Calixto fue también un grande. Multifacético, no solamente daba vida a diario a su personaje Celedonio Menares, sino que además hacía los libretos de toda la trama, un trabajo titánico debido a que la acción no debía nunca perder frescura e inventiva. Por décadas en Radio Del Pacífico, "Hogar, dulce hogar" murió en Portales.
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